RESUMEN DE SACRAMENTOS

Es un breve resumen en el cual abarca toda la tematica en torno a la realidad sacramental del hombre y su misterio salvifico a lo largo de la historia de salvación. Abarca los temas como herejias en el sacramento del bautismo, su fundamento biblico, en el derecho canonico entre otros temas.

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ACERCAMIENTO E INTERPRETACION DE LOS “SIGNOS DE LOS TIEMPOS” EN LAS DISTINTAS AREAS DE LA TEOLOGÍA, APLICADO A LA PARROQUIA DE MARÍA AUXILIADORA

MAURO URBANO URBANO

P. PEDRO PABLO MÚNERA, CJM

Director

SEMINARIO MAYOR LOS SAGRADOS CORAZONES

CICLO DE TEOLOGÍA

SAN JUAN DE PASTO

2008

ACERCAMIENTO E INTERPRETACION DE LOS “SIGNOS DE LOS TIEMPOS” EN LAS DISTINTAS AREAS DE LA TEOLOGÍA, APLICADO A LA PARROQUIA DE MARÍA AUXILIADORA

MAURO URBANO URBANO

P. PEDRO PABLO MÚNERA

Director

Trabajo presentado como requisito parcial para culminar los estudios teológicos

SEMINARIO MAYOR LOS SAGRADOS CORAZONES

CICLO DE TEOLOGÍA

SAN JUAN DE PASTO

2008

1. TITULO

ACERCAMIENTO E INTERPRETACION DE LOS “SIGNOS DE LOS TIEMPOS” EN LAS DISTINTAS AREAS DE LA TEOLOGÍA, APLICADO A LA PARROQUIA DE MARÍA AUXILIADORA

Se pretende un acercamiento al contenido y significado de la expresión “signos de los tiempos” en las diferentes ramas de la teología que ayuden al correcto entendimiento y a la interpretación de los signos de Dios y de su Reino en la comunidad de la parroquia de María Auxiliadora.

2. DEFINICIÓN DEL PROBLEMA

2.1. ANTECEDENTES DEL PROBLEMA

En mi experiencia cristiana han surgido muchos interrogantes y cuestiones de diversa índole. En la síntesis filosófica trabajé acerca del sentido de la vida humana ante un realidad de sin sentido vital.

A lo largo de mis estudios teológicos me han llamado la atención muchos temas… pero deseo detenerme en un problema que signifique mucho para mi vida personal, comunitaria y parroquial; es por eso, que me he detenido a contemplar el tema de los “signos de los tiempos” como punto esencial para descubrir el paso salvador a cada instante de mi vida para tener sentido de existencia relacional con el Dios de la Vida.

2.2. FORMULACIÓN DEL PROBLEMA

¿Cómo saber interpretar los “signos de los tiempos” en la comunidad parroquial de María Auxiliadora? ). ¿La comunidad parroquial de María Auxiliadora lucha por estar atenta a los Signos de los Tiempos?
En el compromiso por extender el Reino de Dios en el mundo, ¿a quiénes corresponde dicha misión?

En realidad se sabe interpretar muchas cosas, pero no se acrecienta la sensibilidad personal espiritual para reconocer al Señor que está pasando continuamente por la vida, en las situaciones buenas y menos favorables; falta olfato y tacto divino para discernir todas las realidades que acaecen a diario.

1. DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA

Una inmensa mayoría del pueblo de Dios desea percibir la presencia de Dios en cosas espectaculares y maravillosas; andan pidiendo signos para creer, poniéndole condiciones a Dios, olvidándose de su presencia amorosa permanente del Padre celestial en Jesucristo gracias al espíritu en todo momento y lugar. No se detienen a contemplar el tiempo como “kairós” del Señor u oportunidad graciosa de salvación para darle sentido pleno a la vida.

Estamos ante un mundo pragmático y racionalista que ha sofocado, por su prisa, la sensibilidad espiritual para percibir cos ojos de fe todas las circunstancias de la existencia para poder darle un sentido a la vida según el querer de Dios.

Se va echando al olvido las relaciones interpersonales y de las dimensiones vitales del ser: el centrarse en sí mismos para conocerse de la mejor manera posible y aceptarse tal como es, el descentrarse en los otros por medio de las relaciones de amistad fraternas y creciendo juntos, y el supercentrarse en Dios como fuente y cima de toda comunión viviendo cada instante como oportunidad grandiosa para estrechar los lazos de amor y unidad en el Señor Jesús.

3. JUSTIFICACIÓN

En la realidad actual en que el hombre está alcanzando procesos insospechados, el advenimiento de nuevas ciencias que permiten que se dé un gran desarrollo, donde el hombre puede dar la vuelta al mundo en pocas horas, tiene en sus manos el conocimiento de la luna, y algunos planetas; poderosas computadoras que procesan en segundos miles de informaciones; las noticias circulan por medio de la INTERNET casi al mismo tiempo que los hechos, en que el hombre es el propio protagonista.

Tal parece que no hay barrera alguna que pueda detener el afán del progreso del hombre.

Frente al prodigio del desarrollo de las ciencias se observa, sin que nadie se preocupe, una profunda regresión en el sistema de convivencia. Se dejan a un lado las tradiciones que dejaron los antepasados, se aplazan venerables costumbres, se aprecia como repugnante cualquier procedimiento de autocontrol, se hace caso omiso de las normas y valores.

Se huye de los problemas inhibiéndose y recurriendo a las drogas. La libertad se identifica con la mayor irresponsabilidad. Ya no se tiene en cuenta lo bueno o lo malo, todo es válido y permitido, sin saber lo que se debe hacer y lo que realmente se quiere. Así como están las cosas, sobreviene el desencanto por la vida, llevando al terrorismo que desencadena la prisa.

El mundo actual está perdiendo el sentido de Dios (autonomía autosuficiente, subjetivismo moral, búsqueda de sentido por caminos cerrados a la trascendencia) y el sentido del "otro"-persona, grupo o pueblo-, por lo que necesita redescubrir las exigencias éticas fundamentales para una convivencia realmente humana

El mundo actual camina, por las comunicaciones, hacia ser la "aldea global"(RMi 37), aunque entendida como una globalización insolidaria: en un mundo así, la Iglesia está llamada a ser sacramento, signo e instrumento de unidad y comunión (LG 1.

El mundo es "lugar teológico" en el que escuchar la voz de Dios (GS 2, 4, 11, 44) y la lectura en la fe de los signos de los tiempos es un deber de todo el pueblo de Dios, especialmente de los pastores y doctores (GS 44)

De esta manera, conviene preguntarse acerca del sentido que la vida, cómo leer los signos de Dios en medio de la vida cotidiana para darle pleno significado a la existencia humana.

Dios esta presente en la persona humana y en la comunidad; pero, es necesario tomar conciencia de ello y actuar en consecuencia. Se hace importante la pregunta acerca de los “signos de los tiempos” en el hoy de la salvación, donde Dios está actuando constantemente en la historia del mundo y del hombre para vivir cada instante como un “kairós” de Dios, una oportunidad de salvación.

La comunidad parroquial de María Auxiliadora necesita tomar conciencia de la importancia de sentir y experimentar a Dios en todas las circunstancias de la vida. Por ello, necesita de un método para saber interpretar los “signos de los tiempos”, seguir caminando hacia delante en el Proceso de Renovación Pastoral y Evangelización, entrando en la segunda etapa, empezando a conformar los grupos de familia y organizándose cada vez más como comunidad.

Dios se hace presente en la comunidad transformándola e impulsando desde el corazón de cada persona para que trabaje en la edificación del Reino en el aquí y en el ahora de la salvación.

4. OBJETIVOS

1. OBJETIVO GENERAL

Comprender el significado y el contenido de la expresión “signos de los tiempos” por medio de la reflexión teológica para crear un método de interpretación del paso de Dios en la vida de la comunidad de la Parroquia de María Auxiliadora en el año 2008.

4.2. OBJETIVOS ESPECIFICOS

4.2.1. Presentar el significado y el contenido de la expresión “signos de los tiempos” en la Sagrada Escritura para que se constituya como base de la interpretación de la actuación de Dios en la historia y existencia humana del creyente.

4.2.2. Desarrollar la interpretación que se ha dado a la expresión “signos de los tiempos” en la Patrística, en la teología fundamental, en la teología pastoral, en la teología dogmática, en la escatología para reconocer su sentido verdadero y entender de la mejor manera posible su contenido.

4.2.3. Proponer un método de interpretación de los “signos de los tiempos” para la parroquia de María Auxiliadora, con el fin de que esta comunidad trabaje con dinamismo, orientada por el Proceso de Renovación hacia la comunión y participación que lleva la Diócesis

4. MARCO REFERENCIAL

5.1. MARCO TEÓRICO

Para el desarrollo de esta síntesis teológica, se tomará como punto de partida la reflexión teológica acerca del contenido y el significado que tiene la expresión “signos de los tiempos en la Sagrada Escritura, los Padres de Iglesia, el Concilio Vaticano II y los documentos conclusivos del CELAM; como también el aporte que realiza la teología fundamental, espiritual, litúrgica, moral, pastoral y dogmática, dentro de ésta última la pneumatología y la escatología.

Se reflexionará los textos que presentan los evangelios sinópticos: Lucas 12, 54-59 (y paralelos): “En aquel tiempo, decía Jesús a la gente: Cuando veis una nube que se levanta en el occidente, al momento decís: "Va a llover", y así sucede. Y cuando sopla el sur, decís: "Viene bochorno", y así sucede. ¡Hipócritas! Sabéis explorar el aspecto de la tierra y del cielo, ¿cómo no exploráis, pues, este tiempo? ¿Por qué no juzgáis por vosotros mismos lo que es justo? Cuando vayas con tu adversario al magistrado, procura en el camino arreglarte con él, no sea que te arrastre ante el juez, y el juez te entregue al alguacil y el alguacil te meta en la cárcel. Te digo que no saldrás de allí hasta que no hayas pagado el último céntimo”.

La expresión «signos» o «señales de los tiempos» la encontramos en Mt 16:3. El contexto es un pasaje en el que los fariseos y los saduceos le piden a Jesús una señal del cielo. La respuesta de Jesús es brusca y clara: la generación presente es mala y adúltera, y no recibirá más señal que la señal de Jonás. Y quienes preguntan son hipócritas, porque saben distinguir el aspecto del cielo, pero no «las señales de los tiempos» (Mt 16:1-12). Si atendemos a los otros evangelios, nos encontramos con pasajes paralelos.

Los tres evangelistas sinópticos, e incluso el mismo Juan (Jn 6:30) conservan la idea de una petición hecha a Jesús reclamando una señal. Incluso en Mateo aparece dos veces la petición de la señal, y la negativa de Jesús a darla, diciendo que solamente se dará la señal de Jonás (Mt 16:1-4 y 12:38-39). Posiblemente el contexto judío del evangelio de Mateo haya determinado un interés mayor en las señales. En cualquier caso, estos materiales semejantes están organizados de manera muy diversa por los evangelistas.

En Marcos conservamos la petición de una señal por parte de los fariseos y la negativa de Jesús a proporcionarla (Mc 8:11-13). Lucas recoge la petición de la señal (Lc 11:16) en el contexto del material referido a la acusación dirigida a Jesús de estar endemoniado, para después recoger la negativa de Jesús a dar una señal, y la alusión a Jonás (Lc 11:29-32). Más adelante, en Lc 12:54-56 aparece la mención de la hipocresía de quienes distinguen las señales del clima y no son capaces de distinguir «este tiempo» (τὸν καιρὸν τοῦτον). No se habla por tanto de «señales de los tiempos», sino solamente de «este tiempo»¹.

La expresión bíblica sobre «los signos» o «las señales de los tiempos» (σημεῖα τῶν καιρῶν) se ha convertido en una moneda de uso corriente en la teología y en el lenguaje eclesiástico contemporáneo. Con frecuencia, la expresión se utiliza para llamar la atención sobre situaciones sociales o políticas contemporáneas que requerirían una atención especial por parte de los cristianos. A veces, los “signos de los tiempos” sirven para llamar a las iglesias a la conversión, sacándolas de algún tipo de algún tipo de acomodamiento que les llevaría a no responder a los llamamientos que el Espíritu puede estar haciendo a través del contexto contemporáneo. En estos casos, la expresión «signos de los tiempos» tiene un sentido que pretende ser «profético», y presuntamente «progresista». Otras veces, la utilización de esta expresión puede tener un sentido totalmente inverso: apelar a los «signos de los tiempos» sería un modo de enunciar resignadamente la necesidad de adaptarse al mundo, aceptando sus modos habituales de proceder como algo inevitable, a lo que la Iglesia cristiana tendría que plegarse. En este caso, los «signos de los tiempos» serían un modo «conservador» de enunciar el deseo de que las cosas sigan tal como estaban, sin pretender innovaciones ni rupturas².

Teniendo en cuenta todas las ramas de la teología desde el Concilio Vaticano II³ podemos tener en cuenta lo siguiente: el problema fundamental que se plantea es, pues, redescubrir el nexo entre la historia y el Espíritu de Cristo, de tal manera que los nuevos interrogantes de la historia permitan comprender de nuevo el Evangelio en el tiempo. Resulta necesaria, por tanto, una teología de los "signos de los tiempos". Por desgracia, más allá de la inflación de la expresión, que por lo general se usa para indicar los rasgos que caracterizan nuestra época histórica, la teología post-conciliar no ha sabido ahondar el significado teológico hermenéutico de esta categoría.

Solo recientemente los trabajos de, entre otros, P. Hünermann, G. Ruggieri y H.-J. Sander han subrayado el carácter eminentemente teológico de esta categoría que integra así sus otros contenidos. Así por ejemplo Hünermann caracteriza a los signos de los tiempos de la siguiente manera: "Bajo 'signo de los tiempos' el Concilio Vaticano II ha señalado acontecimientos históricos o realidades en los cuales el Espíritu de Dios y sus obras resplandecen. El concilio ha exhortado a los cristianos a tomar en serio esos signos y ha reconocer en ellos la presencia y llamado de Dios"⁴.

Reinterpretar los acontecimientos, discernir los signos de los tiempos, interpretar la praxis a la luz del evangelio son distintos modos de decir que la realidad, toda realidad, cualquier realidad humana, es portadora de sentido divino, tiene sentido en el camino del hombre y la mujer hacia Dios. Es tarea de la teología desentrañar ese sentido, que es uno -y no el único sentido- que la realidad tiene.

La significación teológica, creyente, cristiana, espiritual, religiosa de la realidad, no acaba con la significación económica, política, psicoanalítica, estética, histórica y ética de la realidad. Más aún todos esos sentidos, esas significaciones son relevantes y pertinentes a la lectura teológica. Si Dios es el Creador del Universo y el Señor de la Historia, nada de lo humano le es ajeno. No se encuentran en la historia territorios sagrados y otros profanos; todos son portadores de sentido en el camino de la humanidad hacia Dios.

Los distintos sentidos y significaciones que la realidad tiene, captados por las distintas aproximaciones a lo real, son condición de posibilidad para el quehacer teológico, pero no condición suficiente para su tarea. No puede prescindir de los datos e interpretaciones que ofrecen otras disciplinas en su aproximación a lo real (en una especie de deducción que habla solo desde la revelación), pero tampoco puede reducir su mirada teológica a los datos e interpretaciones que le suministran las otras disciplinas (en una especie de inducción o dependencia de análisis que simplemente sanciona). Ni aplicación de principios previamente determinados a una situación histórica concreta. Ni la disolución liberal de la teología en la supuesta univocidad de los datos que sobre el presente pueden aportar otras ciencias. Ni la vía `deductiva' del realismo sobrenaturalista ahistórico ni el procedimiento 'inductivo' del realismo liberal. Lo primero renuncia a captar el presente en su positividad; lo segundo esfuma la positividad teológica". Una teología auténtica debe evitar, por una parte la pretensión de querer construir un sistema de la pura doctrina cristiana fuera de toda situación histórica, por otra, la simple reducción del mensaje cristiano a una situación cultural dada.

La teología propone entonces una circularidad hermenéutica entre el mensaje cristiano y la situación actual, que aspira a terminar con toda yuxtaposición entre estos mismos polos que parecen constituirla, pues la acción de Dios se verifica en determinados signos discernibles en la historia, y la interpretación de esos signos nos permiten reconocer a Dios actuando en ellos. De la misma manera determinados signos, en vez de ser testimonio de Dios son obstáculos a su acción, y si no se denuncian y desenmascaran como tales, nos seducen y alejan de lo que Dios quiere y alienta en nosotros. Pero si toda la realidad nos aleja o acerca a Dios, ¿qué aspectos de ella son hoy más relevantes, qué acontecimientos son los más significativos?

Los signos que tenemos que mirar, las voces que tenemos que atender, los aspectos de la realidad que merecen nuestra atención de creyentes y teólogos son los que resultan más significativos para la vida plena del hombre, porque la favorecen o la dificultan. Lo más significativo para Dios es aquello que es más significativo para el hombre.

El sentido teológico de la realidad no se agota en los otros sentidos, pero requiere de ellos para ser descubierto. Elegir algunos signos, auscultarlos, interpretarlos premunidos de algunas hipótesis y opciones es comenzar a hacer teología. Pues no solo debemos elegir algunos signos sino que también las disciplinas, las mediaciones analíticas que nos permitan analizarlos y desentrañar sus múltiples sentidos. Junto a la elección de las perspectivas más adecuadas, conviene también elegir un buen lugar. ¿Desde dónde mirar? La mirada nunca es neutra, siempre ocurre desde algún lugar, desde alguna situación. Más bien desde varias situaciones. Las situaciones predeterminan la mirada⁵.

Tarea de todos los tiempos que el Concilio Vaticano II, al considerar la naturaleza y misión de la Iglesia en el mundo contemporáneo, lleva a cabo con un discernimiento y una interpretación de la situación histórica en la que la Iglesia está inmersa y de la que forma parte. Esta operación, que da su contenido y método a Gaudium et Spes, consiste en “escrutar los signos de los tiempos e interpretarlos a la luz del Evangelio” (GS, 4.). De esta manera la Iglesia conciliar ha querido hacer suyos y responder con la actualidad del mensaje del Evangelio a “los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren” (GS, 1).

En nuestro continente tanto el magisterio como la teología latinoamericana asumen la perspectiva propugnada por el Concilio. Desde la conferencia episcopal de Medellín se da testimonio de una práctica episcopal y teológica en la que se intenta discernir con mirada pastoral la realidad de América Latina, y orientar los esfuerzos hacia una transformación que permita la liberación de los pobres y la evangelización de la cultura.

La interpretación teológica de la época se nutre de la teología académica, del recurso que esta hace a varias otras disciplinas humanistas y científicas, y a la sabiduría creyente de pastores y laicos. La interpretación teológica del presente, en consecuencia, además de una historia tiene una actualidad particular. Su objetivo es discernir los signos de la actuación presente de Dios en vista a sugerir las acciones humanas que con mayor seguridad debieran verificarla.

5.2. MARCO CONCEPTUAL

Es necesario conocer conceptos de gran importancia que se van a utilizar en la realización de esta síntesis.

Signos de los tiempos: expresión común dentro de la Iglesia Católica que hace referencia a los hechos trascendentes de la historia. Se asocia comúnmente a la capacidad de interpretar los signos de los tiempos como una lectura que separa los hechos históricos trascendentes para la vida del hombre (de cara a su relación con Dios) con aquellos que no lo son⁶.

Kayros o Kayrós , "el momento justo", es en la filosofía Griega y Romana la experiencia del momento oportuno, los pitagoricos le llamaban Oportunidad, Kayros es el tiempo en potencia, tiempo atemporal o eterno, y el tiempo es la duración de un movimiento, una creación.

• Para Proclo (filosofo griego) y para ciertos pitagoricos Kayros es el primer Dios y la primera causa.

• Kayros también es la risa, la risa oportuna que produce bien.

• San Pablo denomina Kayros a jesucristo.

• otros afirman que Kayros es el dios del tiempo y las estaciones.

• Mitología: Hijo menor de Zeus y Túje, en la genealogia de los dioses Kayros parece estar asociado a todos los dioses, es decir Kayros es Zeus, pero también hijo de Zeus, Kayros es kronos(tiempo)pero también Eternidad (Aevum, Kayros es atenea y también es Eros, Dionisio es Kayros.

En el monoteísmo Kayros y eternidad pasan a ser atributos de Dios, así aparece en la definición del Bien por Platón, en lo UNO de Plotonio, en la Inteligencia divina de Aristóteles y en la definición de Plutarco donde la eternidad (Nunc stans)es un atributo que solo dios posee.

En la religion Católica Kayros, es el momento de Dios. En nuestra Estructura temporal, tenemos una sola palabra para significar el "tiempo". Los griegos tenían dos: chronos y Kayros. Chronos es el tiempo del reloj, el tiempo que se mide. Kayros, “el momento justo”, no es el tiempo cuantitativo sino el tiempo cualitativo de la ocasión, la experiencia del momento oportuno. Los pitagóricos lo llamaban la Oportunidad. Todos experimentamos en nuestras vidas la sensación de que llegó el momento adecuado para hacer algo, que estamos maduros, que podemos tomar una decisión determinada. Para los mayas era el Zubuya. En la religion Católica Kayros, es el momento de Dios. Kayros, para los sicólogos, es un "Insight"(El "insight" es la capacidad de darse cuenta, es tomar conciencia en forma súbita de una realidad interior, que normalmente había permanecido inconsciente). En general, es un "Momento de claridad⁷".

La palabra “discernimiento” proviene del latín “cemere” que significa “escoger”, en el sentido de seleccionar, separar. El prefijo “dis” refuerza la idea de división, de escoger. Por lo tanto, “discernimiento” significa separación, discriminación.

Efectivamente, esta palabra sirve para indicar la facultad de escoger, de distinguir, inherente a la mente humana, primero como poder embrionario y latente y, después, a medida que ella progresa y se desarrolla, como una cualidad cada vez más aguda, completa y profunda.

Se puede decir que esta cualidad mental sigue el proceso evolutivo de la mente del individuo, dado que se inicia cuando en el hombre surge el primer destello de dualidad y alcanza su expresión más alta y plena, cuando él despierta totalmente para la consciencia espiritual y adquiere visión de aquello que está detrás de la forma.

Efectivamente, el verdadero discernimiento espiritual es la facultad de la mente de discernir entre lo irreal y lo Real, entre lo que es efímero y caduco y lo que es eterno e imperecedero y, por lo tanto, es la meta y punto de llegada de un largo camino con varios grados y etapas⁸.

Discernimiento bíblico: Ya que el discernimiento exige tener un modelo de valores morales, muchos utilizan la Biblia como "el criterio", para poder distinguir la diferencia entre lo que es "bueno" y lo que es "malo", desde el punto de vista de Dios. Considerada, una de las normas de "valores morales"⁹.

5.3. MARCO HISTÓRICO

En lo que se refiere a la expresión “signos de los tiempos”, ha sido utilizada en la Sagrada Escritura, en los evangelios sinópticos, refiriéndose a las señales de la presencia escatológica del Reino de Dios en la persona de Jesucristo.

La expresión "signo de los tiempos", usada frecuentemente por Juan XXIII, está inspirada en el texto evangélico de Mateo 16, 3: "Saben discernir el aspecto del cielo y no pueden discernir las señales de los tiempos". En el contexto evangélico se refiere a los signos de la venida del Mesías. En la aplicación actual es una invitación a descubrir las señales de la voluntad de Dios, que se manifiesta por medio de los acontecimientos. Juan XXIII, en la convocación al Concilio Vaticano II (1961. Consto Humanae Salutis) y en la encíclica Pacem in terris (1963) invita a considerar algunos signos de los tiempos: la renovación de la Iglesia, el respeto por los derechos humanos fundamentales, la entrada de la mujer a la vida pública, la transformación de la familia, etc. Posteriormente se irían adhiriendo otros signos: el deseo de la unidad universal, las situaciones de injusticia o de guerra, etc.

La Iglesia está llamada a edificar el Reino de Dios en una situación real y concreta. La exhortación de Paulo VI sobre la evangelización, invita a discernir y seguir los signos de los tiempos en ese campo. La Palabra de Dios, luz para nuestros pasos. La Palabra de Dios, siempre viva, comunica nuevas luces para solventar las situaciones nuevas que se presentan en el caminar apostólico. El Espíritu Santo "explica a los fieles el sentido profundo de las enseñanzas de Jesús y su misterio... Él es quien hace discernir los signos de los tiempos -signos de Dios- que la evangelización descubre y valoriza en el interior de la historia"(EN 75). La realidad, toda entera, que incluye los acontecimientos, no debe ser analizada con a la luz de una ideología materialista, sino a la luz de la persona y mensaje de Jesús, en quien hay que "recapitular todas las cosas" (Ef 1, 10).

Sólo así se acierta en el discernimiento y se llega a asumir compromisos personales y comunitarios, en un proceso de ver, juzgar y actuar. Discernir los signos de los tiempos atañe a todos. "Es un deber de todo el Pueblo de Dios, pero principalmente de los pastores y de los teólogos, auscultar, discernir e interpretar, con la ayuda del Espíritu Santos, las múltiples voces de nuestro tiempo y valorarlas a la luz de la palabra divina, a fin de que la Verdad revelada pueda ser mejor percibida, mejor entendida y en la forma más adecuada" (GS 44).

El tema que se va a desarrollar se contextualiza en el marco del Proceso de Renovación Pastoral iniciado en la diócesis de Pasto en el año 1999 y que el año 2008 culminará su primera etapa de sensibilización a los valores del Reino. Dicho Proceso se está llevando a cabo en la parroquia de María Auxiliadora, que ha sido fundada en el año 2004, siendo anteriormente una Unidad Pastoral, bajo la guía del padre Luis Antonio Gallardo. Esta parroquia vive una situación social difícil a causa de la marginación del Municipio de Pasto y porque la conforman personas venidas de las distintas partes de Nariño y otros departamentos.

Ahora la comunidad parroquial de María Auxiliadora se prepara para iniciar, en el marco del PDR/E, la conformación de los Grupos de familia. Por eso, en este trabajo se pretende descubrir el “paso” continuo de Dios en todas las circunstancias como un impulso para descubrir la voluntad del Señor, tanto a nivel personal como comunitario para ver la realidad, juzgarla con ojos de fe o desde la Palabra de Dios, transformarla según el querer divino, evaluarla para proyectarse hacia adelante y celebrarla como hermanos en el señor.

4. DISEÑO METODOLÓGICO

6.1. TIPO DE INVESTIGACIÓN

Investigación hipotético-deductivo: por medio de la cual se pretende analizar y describir el contenido y el significado de la expresión “signos de los tiempos” para aplicarlo a la realidad de la parroquia de maría auxiliadora. Se planteará la base teológica para llegar a la aplicación en la realidad de dicha Parroquia.

6.2. DESARROLLO METODOLOGICO

Para El desarrollo del trabajo de síntesis, se va a llevar a cabo el siguiente procedimiento:

6.2.1. Recolección de información: Leyendo libros, síntesis, artículos y navegando en la INTERNET; para tener una base documental al analizar el contenido y el significado de los signos de los tiempos en la Sagrada escritura y en la teología actual.

6.2.2. Selección de datos investigados: Para delimitar y dar el verdadero rumbo a la temática a desarrollar.

6.2.3. Análisis de los textos de investigación: Para dar el enfoque verdadero a la temática que se va a desarrollar.

6.2.3. Acercamiento a la realidad: A medida que se va leyendo los textos se va haciendo su aplicación al contexto real de la parroquia de María Auxiliadora.

6.2.4. Conclusiones y sugerencias: Para un mejor entendimiento del trabajo realizado.

6.3. POBLACIÓN

Esta síntesis estará aplicada especialmente a los integrantes de las estructuras parroquiales que se han venido gestando en el desarrollo del PDRP/E, es decir, EPAP, ESAPs, Visitadores de los grupos de familia y quienes participan de la Escuela Bíblica.

6.4. DEFINICIÓN DE HIPÓTESIS

Para lograr dar respuesta al problema planteado aplicaré el método de la lectura de los signos de los tiempos, es decir, se partirá de la realidad actual que vive la parroquia de María Auxiliadora, se juzgará la misma desde la Sagrada Escritura y la reflexión teológica, y se propondrá un modelo de interpretación de los signos de Dios para transformar la vida y las costumbres contrarias al Reino de Dios.

6.5. VARIABLES

Las personas que conforman las estructuras parroquiales pueden cambiar y se encuentran en diferentes edades y de los dos sexos, de diferentes condiciones sociales, educativas…

6.6. ESTUDIO PILOTO

Este proyecto será aplicado preferentemente a los agentes de pastoral de la parroquia de María Auxiliadora.

7. ESQUEMA TEMATICO

Se trabajará en los siguientes capítulos:

a) Significado y contenido de la expresión “signos de los tiempos” en la Sagrada Escritura para que se constituya como base de la interpretación de la actuación de Dios en la historia y existencia humana del creyente.

b) Interpretación de la expresión “signos de los tiempos” en la Patrística, en la teología fundamental, en la teología pastoral, en la teología dogmática y en la escatología.

c) Propuesta de un método de interpretación de los “signos de los tiempos” para la parroquia de María Auxiliadora, con el fin de que esta comunidad trabaje con dinamismo, orientada por el Proceso de Renovación hacia la comunión y participación que lleva la Diócesis.

8. PERSONAS QUE PARTICIPAN EN EL PROYECTO

Para el desarrollo de ésta síntesis se necesita de personas que hagan posible la investigación, el análisis, la asesoría de un experto para guiarla, y hacer que se lleve a cabo dicho proyecto.

MAURO URBANO URBANO. Estudiante de teología en el Seminario Mayor de Pasto, que llevará a cabo la investigación y la realización de la síntesis teológica.

P. Pedro Pablo Múnera. Profesor de filosofía en el Seminario Mayor de Pasto, encargado de asesorar la síntesis teológica para encauzar de la mejor manera posible éste trabajo de investigación. También será el primer lector de la síntesis teológica

Lic. José María Ortíz. Profesor de sistemas en el Seminario Mayor de Pasto y docente en el Instituto Champañag de pasto, quien será el segundo lector de la síntesis teológica.

9. RECURSOS DISPONIBLES

MATERIALES: Libros, artículos.

INSTITUCIONALES: Biblioteca del Seminario Mayor de Pasto, sala de INTERNET, acompañamiento del Director.

FINANCIEROS: Los costos del proyecto no implican mayores gastos. Estos corren por cuenta del quien realiza la síntesis. Hay que contar con $ 600. 000.

10. CRONOGRAMA

11. BIBLIOGRAFIA

12. POSIBILIDADES DE PUBLICACION

1 http://www.centroseut.org/articulos/encu01-4.htm

2 Ibid

3 Gaudium et spes 4, Presbyterorum ordinis 9; Apostolicam actuositatem 14; Unitatis redintegratio 4.

4 J. L. Segundo, Revelación, fe, signo de los tiempos, en: I. Ellacuría/J. Sobrino (eds.), Mysterium Liberationis. Conceptos fundamentales de la teología de la liberación, vol. 1, Madrid 1990, 443-466.

5 ISOCSALE ROLLE, Carlos Ignacio. Teología de los signos de los tiempos: Antecedentes y prospectivas del Concilio Vaticano II. Teol. vida, 2005, vol.46, no.4, p.527-569. ISSN 0049-3449.

6 http://es.wikipedia.org/wiki/Signos_de_los_tiempos

7 http://es.wikipedia.org/wiki/Kairos

8 http://www.alcione.cl/nuevo/index.php?object_id=213

9 http://es.wikipedia.org/wiki/Discernimiento

Los tres sistemas de pensamiento

Los conceptos: Dios, Acontecimiento y Hombre, son manejados en esta presentación, dando lugar a la importancia que tiene el saber reconocer en Dios la fuerza principal creadora, que da plena libertad al hombre para que se desarrolle y baya a su encuentro con fe y dinamismo. El tema en cuestión busca comprender en el sentido del mundo la relación con Dios:

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La Oración y las Peticiones

Las diapositivas que a continuación se presentan, pretenden llevarte a comprender mejor de qué manera debes realizar tu oración, teniendo en cuenta que tu relación con Dios debe conducirte a una entrega incondicional a su voluntad para alcanzar la salvación. Ten presente que la oración es el medio por el cual te interrelacionas con Dios haciendo te participe de su amor.

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los Ritos de la Iniciación Cristiana

El trabajo presentado a continuación es una interpretación del tema “Los ritos de Iniciación Cristiana” del libro de Juien Ries que contiene en su mayoría los ritos de Iniciación en todas las te4ligines. Los apartes de este documento, aquí expuestos nos muestran, tanto la evolución histórica del rito, como la interpretación teológica y popular que se les da a los mismos.

Bibliografía:
Ries Julien. Los ritos de Iniciación. Colección Teshuva, Biblioteca Mercaba. Ediciones EGA-Bilbao 1994. Pags 181-189.

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El Bautismo desde el Derecho Canónico

Para poner una comprensión más amplia sobre la legalidad del Sacramento del Bautismo, se hace necesario analizar los apartes del Derecho Canónico que rige la parte normativa de nuestra Iglesia latina, para poder descubrir así cuales son los derechos y deberes (validez y licitud) con respecto al Bautismo y sus elementos, tanto internos como externos.
Bibliografía:
Derecho Canónico.(CIC) Numerales: 96, 111, 204, 230, 530, 535, 838, 842-878, 1133

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LOS TRES SISTEMAS DE PENSAMIENTO

La vida del hombre siempre se mueve entre la verdad y la incertidumbre, sabemos que el misterio del hombre se esclarece a luz de Cristo Resucitado que lo interpela a ser coherente con lo que predica con sus obras y palabras en su diario vivir.

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BAUTISMO EN EL DERECHO CANONICO

El bautismo es el sacramento por el cual todo hombre puede alcanzar la salvaciòn y vivir según el designio de del Hijo.

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